Nicola Tesla fue un personaje adelantado a su época. Sin embargo su brillo fue efímero debido a las circunstancias idiosincrásicas de su época.

En estos tiempos, el espíritu Tesla se respira en el ambiente. Pero la evolución de las energías del nuevo paradigma debe confluir en paralelo al reto más importante al que la humanidad se haya enfrentado jamás: El despertar de las conciencias.

Tecnológicamente todo es posible, pero el enfoque de SAS  (Servicio a Sí mismo) o de SAO (Servicio al Otro) marcará la diferencia. Desde el momento en el que cada vez más científicos dedican sus vidas al servicio de la humanidad, es porque ya han tomado la decisión de renunciar a sus EGOS en favor del SAO (Servicio al Otro).

En este acto de generosidad máxima, entregan su mente al servicio de la humanidad consciente, sin preocuparse de honores, méritos, reconocimientos y otras tentaciones materiales. Incluso muchos renuncian conscientemente a pasar a la historia escrita, porque prefieren cambiarla desde la modesta y sutil expresión de la mayor generosidad y heroica contribución "de facto".

Son los hechos los que cambian la historia y no las palabras vacías. Son los nuevos Tesla del Siglo XXI, esas mentes brillantes conectadas a corazones llenos de amor por la humanidad, que desde las más humildes posiciones, dedican cada pequeño logro a compartirlo con el resto de los seres humanos, para que ellos alcancen el bienestar colectivo.

Esos pequeños Teslas silenciosos cuya única retribución es conseguir la libertad humana y la materialización de los Derechos Fundamentales de forma Universalizada en esta profunda Edad Media en la que vivimos. Son ellos los verdaderos héroes del Siglo XXI, los que deben soportar laceraciones, insultos, descréditos, abandonos, pérdidas, dolor y en ocasiones el robo de sus patentes, logros, esfuerzo y sacrificio.

Sin embargo, esos Teslas contribuyen diariamente a conectar la luz de las conciencias individuales, despertando a los dormidos y logrando con sus actos de amor por la humanidad, que ésta avance de manera inexorable.

Cuando los Egos no existen, aparece el amor más inmenso jamás sentido: El amor hacia la humanidad como especie. Y ese amor, es el que impulsa la esencia de la energía de los osciladores armónicos interiores del SER No existe nada más sublime, ni energía más libre y poderosa que esa luz que se está encendiendo en el interior de cada pequeño Tesla que dedica su vida al crecimiento de la humanidad. La retribución no se alcanza en esta densidad, sino en la proyección del deseo sincero y la imagen de una humanidad más pura y evolucionada en el respeto de los Derechos Fundamentales de todos y la prosperidad universal.

Con el tiempo, todos esos pequeños héroes serán recordados con la misma intensidad de gratitud profunda y emotiva con la que hoy recordamos a los que dedicaron su vida al servicio de la humanidad entera.

Desde Misterios de la Astrofísica, queremos rendir homenaje en este humilde artículo, a todos y cada uno de los pequeños grandes Tesla que luchan desde su infinita generosidad para que algún día muy próximo, la humanidad entera sea libre.

Desde el más profundo amor, les dedicamos este documental de Nicola Tesla, porque nosotros también decidimos hace mucho tiempo que la esencia de la felicidad está en la sonrisa de toda la humanidad, o al menos en mantener encendida permanentemente la luz de la esperanza.

Este es nuestro homenaje para todos vosotros, los guerreros de la luz, los pequeños grandes hombres y mujeres que dedican su energía infinita a la humanidad.

fuente: http://starviewer.wordpress.com