Queremos conectar con esos lugares y seres sagrados de nuestro entorno vamos a ir a conocer y honrrar a ese gran árbol quizá uno de los más viejos de nuestra zona, meditaremos junto a el, le llevaremos agua como ofrenda simbólica y trataremos de conectar desde la humildad y con profundo respeto...
Este olivo con nombre propio se llama "la Morruda" y esta úbicado en la Sierra Calderona en termino municipal de Segorbe...
Hace mas de mil quinientos años allá por el siglo VI un campesino decidió plantar un árbol, quizá este fue uno de los días importantes de su vida iba a hacer una ofrenda a la tierra y a las generaciones futuras, eligió el olivo, el árbol más longevo de nuestras tierras, lo que no podía imaginar es que esa acción, alimentaría generación tras generación a miles de seres hasta nuestros días, más de mil quinientos años después y aún seguirá haciéndolo durante muchos más.
El olivo es un árbol relacionado con la sabiduría desde la Grecia clásica y quizá venerado mucho antes por nuestros ancestros al ser uno de los arboles que conecta con la esencia de estas tierras y ofrece salud a todos los niveles...
Queremos conectar con esos lugares y seres sagrados de nuestro entorno fuimos a conocer y honrar a ese gran árbol quizá uno de los más viejos de nuestra zona, meditamos junto a el, y tratamos de conectar desde la humildad y con profundo respeto con su energía.
Inmutable, silencioso observador, mudo testigo de numerosas generaciones y posible poseedor de grandes secretos aún no revelados....
Enraizado a la tierra durante tantos siglos..., me pregunto: ¿cuantas veces habrá el viento mecido y agitado su abundante ramaje? ¿cuantas bondades habrá recibido del sol? y....¿cuantas lluvias le dieron de beber?
No, no lo sabremos nunca, lo que si sabemos es que este árbol nacido de una diminuta semilla, fue generoso con sus frutos y que sigue siéndolo a través de los siglos, a pesar de su vejez y cansancio manifestados.
¿Dije inmutable?, tal vez no...., al acariciar su fría y rugosa corteza, un doloroso recuerdo vino a mi mente. Apoyé mi frente en él en busca de consuelo y me obsequió con un hermoso presente, una vibración apenas perceptible vino a recordarme mi conexión con la tierra y el don maravilloso que es la vida..., la pertenencia con el todo, la eterna presencia a pesar de nuestra aparente impermanencia.
No hay espacio para el dolor, lo hay para la vida.
Fue una experiencia compartida muy enriquecedora, otra más, fabricamos un recuerdo entre todos que nos acompañará siempre. Éramos ocho en total ¿una casualidad?
Carmen Domenech.
El olivo ya es parte de nosotros, que bien nos sentimos hubo conexión mas allá de las palabras... fuimos 8 los que vivimos la experiencia aunque con estas palabras la hacemos extensiva a todos los que tenéis conexión, agradezco a Carmen y Pilar que nos ofrecen estas poesías espontaneas que brotaron del corazón de forma natural, al contacto con ese ser del que tanto podemos aprender...fuimos uno con ella y con todo...Gracias a los que lo hicisteis posible...a Mireya y Angel por su hospitalidad y cariño, a todos lo que lo vivisteis por compartir vuestra mejor energía a Jose Felix por el mimo a la hora de cocinar y por esa verdura cultivada con cariño...La Red fluye y se expande con ritmos admirablemente incompresibles doy gracias una vez más por formar parte de esta danza ilimitada...que siga la música...
Ferran
Amanece el día 13 y la morruda espera nuestra llegada, con sus ojos bien abiertos divisa al grupo que se acerca . Se alegra , sonríe y abre sus brazos para recibir a los recien llegados que abrazan su cuerpo sintiendo el perfume y la fortaleza de la madre que ha engendrado miles de hijos .Madre sabia , madre protectora ,quiero seguir aprendiendo. De mi oración junto a ti surgieron colores naranjas, rojos , azules .......y arco iris en tus ramas.
Pilar