Vivimos una época apasionante e intensa, en la que cada vez más personas están despertando de un profundo sueño. Están surgiendo de  forma  espontánea  iniciativas  individuales  y  colectivas  con propuestas creativas, y es el tiempo de elegir dentro y fuera de cada uno de nosotros hacia donde queremos dirigirnos, tanto a nivel individual

como colectivo. Hay que estar atento y tomar decisiones, pequeños pasos, diferentes, espontáneos,  intuitivos... buscar nuevos modelos que representen aquello que nos gustaría encarnar y a la vez descubrir nuestro potencial para conseguir aquello que nos hace vibrar. Es  tiempo de  sabiduría,  reencontrar aquello que nos  conecta  con lo mejor de nosotros mismos y de  los otros, ese espacio donde el miedo y la tristeza no pueden enraizar, sentimos el impulso de crear una vida más plena, más humana, con confianza y determinación podemos conseguirlo. Es hora de comprometerse con la vida, con el planeta, con el ser humano como especie. Estamos siendo testigos de una verdadera “r-evolución” silenciosa, somos parte de ella, y en la medida en que seamos más conscientes del proceso, podemos ser actores y participar activamente en la construcción de ese mundo que anhelamos. Cada uno sólo tiene que hacer aquello que sabe y hay que hacerlo ahora.