Con frecuencia cuando hablamos de economía humanizada, parece que pasamos por alto la “Creación de valor”,como fuente de riqueza y prosperidad. Quizás se menciona ocasionalmente algún aspecto relevante, pero en realidad no se le suele prestar mucha atención y sin embargo la creación de valor representa una parte importante del nuevo paradigma económico en nuestra sociedad.

Además solemos ser nosotros quienes generamos la percepción de vivir en la escasez económica o en el permanente sacrificio para mantener determinado nivel de ingresos, independientemente de tener un trabajo por cuenta ajena o de disponer de un negocio o de una actividad profesional propia que nos acerque al empoderamiento.

Es por ello que vamos a dedicar este articulo a utilizar la “Creación de Valor” como una herramienta que nos ayude a mejorar y a transformar radicalmente nuestra relación con el dinero y de esta manera, mejorar nuestros ingresos, pues es vital en todo proceso de cambio y transformación interior generar riqueza y tener una relación saludable con nuestra economía y actividad profesional, sirviéndonos de esta manera en palanca de transformación.

Empezaremos aclarando que los problemas económicos, son siempre problemas mentales y de creencias erróneas. Si queremos cambiar nuestra situación económica, tendremos que en primar lugar cambiar nuestras creencias negativas y erróneas.

La “Creación de Valor” hace por tanto referencia al valor realmente creado y aportado por nosotros en nuestra actividad profesional y a la sociedad en general.

Este enfoque puede verse muy claramente cuando disponemos de un negocio o actividad profesional independiente y no conseguimos generar abundancia económica. Pensamos que son las causas externas, tales como la crisis económica o que el sector específico de actividad al que nos dedicamos esta muy mal, pero la razón real no esa , sino que se esconde detrás de nuestros pensamientos y creencias más profundas, que son los que nos limitan a generar riqueza y abundancia.

Por tanto lo fundamental a destacar es que somos nosotros mismos quienes nos estamos continuamente saboteando e impidiendo que podamos generar riqueza y ese bienestar económico y profesional.

En segundo lugar es que para “Crear valor”, tenemos que aprender a “ Agregar valor” a aquella actividad a la que nos dediquemos. La razón es que normalmente la escasez surge de un valor percibido bajo, lo que implica que la percepción de quien utiliza nuestro producto/servicio es que es caro o quizás desproporcionado. Esta percepción implica un claro detrimento del precio al que el cliente esta dispuesto a pagar y por tanto implica un escasez o merma significativa en nuestros ingresos y por tanto no generación de riqueza.

Si consiguiéramos que la percepción de valor fuera alta, entonces el producto/servicio se percibirá como barato o razonable, lo que inmediatamente supondrá una mejora en nuestros ingresos pues tendremos un mayor volumen de productos o servicios vendidos. No podemos olvidar que valor y el precio no es lo mismo y que un valor alto realmente percibido , implicará un precio más alto y un mayor volumen y por tanto mayor riqueza.

Entonces, la pregunta lógica es como agregar valor y así conseguir esa mejora significativa en los ingresos , de la que estamos hablando. La respuesta es que a través de cuanto pasos claramente estructurados se puede conseguir. Estos pasos son:

 

1º- Definir la PROPUESTA DE VALOR

 

Esta definición implica asociar poderosamente nuestra actividad profesional a una propuesta (Producto/Servicio) con un elemento o emoción positiva, como:

 

Salud,Belleza,Bienestar,Tranquilidad,Confianza,Satisfacción,Elegancia,Éxito,Esperanza,

etc. Ejemplo un Psicologo aporta Bienestar y Esperanza y no solo servicios de terapia.

 

2º- Diseñar un Plan para CREAR VALOR

 

Debe de ser un plan minucioso y detallado. En este caso, lo importante es el: 

 

-     Como, cuando, donde y a quien agrego este valor creado, etc.  Además tenemos que ser capaces de que los usuarios de este producto/servicio, perciban este valor de manera efectiva y real y que no solo sea un concepto creado y percibido por nosotros.

 

3º- Ejecutar el plan de CREAR VALOR

 

Aplicamos para ello las tres reglas básicas de la creación de valor que son:

 

- Ayudar, Agradecer y Apreciar.

 

Esto significa que si aplico estas tres reglas a mi actividad, es decir ayudo a los demás a crear valor, agradezco el valor recibido a todos los involucrados en mi actividad para que pueda crear valor y aprecio todo el valor recibido, entonces estaré creando valor real.

En resumen,podemos decir que si el valor percibido un usuario es superior al valor esperado, entonces creo valor. Si es igual ni creo ni destruyo y solo en caso de que el valor percibido sea inferior al esperado, es cuando se destruye valor. Dicho de otra manera, el valor de un bien o servicio, depende de sus expectativas futuras.Si el usuario de ese producto/servicio que ofrecemos, agradece y aprecia el valor aportado por nosotros, entonces habremos realmente creado valor y por tanto riqueza.

 

4º- Aportar parte de ese VALOR CREADO

 

Este es un punto vital, pues si no aporto a la sociedad de manera altruista parte de ese valor que he recibido, no crearé valor en el futuro y por tanto no generaré riqueza.No podemos olvidar las tres reglas básicas y que por tanto si quiero recibir valor, tendré que ser capaz de ayudar a otros a crearlo y ademas agradecerlo y apreciarlo y no hay mejor manera de hacerlo que a través del altruismo.

Como conclusión, Crear Valor es Crear Riqueza y por tanto el dinero aparece como consecuencia de la riqueza. En lugar de vivir un conflicto con el dinero, hay que establecer una relación armoniosa y fluida con el mismo y para ello el mejor camino es el de la creación de valor y riqueza como camino hacia el empoderamiento personal y colectivo.

Como se puede apreciar, los problemas con el dinero son siempre consecuencia de un estado mental negativo, es decir de creencias erróneas y negativas. A través de esta vía de la creación de valor podemos cambiar esta consigna, transformándola en fuente de plenitud interior además de ayudar a cambie positivamente nuestra sociedad.

Javier Carbonell 

Economista, Consultoría de Econmía humanizada