“Es una tecnología fácil de estructuras bellas, con los materiales más sencillos. Conlleva poder construir nuestra propia casa con techos altos, arqueados, con poco más que agua y barro, acabándola después con revocos, alicatados, ventanas, elementos ornamentales,... en pocos días.
Bajo nuestros pies, hay todo un tesoro: la tierra y el agua. Por encima del suelo, las
personas que anhelamos paz, cooperación, felicidad.
Este sistema nos ofrece la libertad de ir a cualquier rincón del mundo, cavar y construir para nosotros, una vivienda, y para nuestra comunidad, los espacios comunes necesarios, utilizando la tierra, el sol, el viento y los elementos naturales. Durante el proceso, las personas descubren su propio potencial creativo”, decía Khalili.
Las viviendas de Superadobe están basadas conceptualmente en métodos de construcción tradicionales del medio oriente, que pueden incorporar, sistemas energéticos renovables, como agua caliente solar, equipos eléctricos fotovoltaicos, depuración y reciclaje de aguas, y otros que den lugar a edificios autónomos, ecológicos, sostenibles, bellos.
Estamos viviendo uno de los momentos más apasionantes de la historia de esta humanidad.
Las estructuras que durante milenios, nos han permitido desarrollar este proceso evolutivo, han dado como resultado esta civilización, esta realidad de vida e interacción, que configura nuestro mundo actual.
Hemos atravesado un intensivo y profundo período de salvaje materialismo, como si la materia fuese lo fundamental o único en nuestra existencia.
Hemos dejando de lado realidades, que siendo esenciales y vitales, por no ser tan tangibles, han sido desechadas.
El resultado: deshumanización, desequilibrios, injusticias, dolor, desarmonías, destrucción…
Siendo esta realidad insostenible, es sorprendente observar, cómo esa misma realidad, progresivamente, nos ha ido llevando a un estado de tensión, que nos empuja a una búsqueda de formas de relación y actuación humana, alternativa a la existente, que mute esta situación cuyo desmoronamiento observamos.
Así pues, no se trata en modo alguno de censurar lo vivido, sino de tomar conciencia de que ha sido un proceso de aprendizaje, que nos ha permitido ampliar nuestra visión y sensibilidad, preparándonos para un nivel evolutivo más armonioso.
Muy repetidas veces a lo largo de la historia, hemos sido creadores de estructuras de poder o guerrilleros que nos enfrentábamos a lo que nos imponían, perseguidores o perseguidas, amantes o amadas, censuradoras o criticados, mujeres u hombres, madres o hijos, líderes o mendigos.
Hemos experimentado vivencias, que desde muy diferentes puntos, nos han permitido amplificar nuestra comprensión, acercándonos más al entendimiento de la interconexión, profunda y sensible, que nos une a todos.
Todo lo que hemos vivido, ha sido útil para ayudarnos a entender esa unidad y potenciar el salto esperanzado, que se muestra como una gran oportunidad de transformación.
La creación de un nuevo sistema de interrelación de la humanidad, consigo misma y con todas las manifestaciones vivas que pueblan este planeta, parece amanecer en nuestro horizonte.
Este anhelo de cambio que palpita en tantos corazones, parece empezar a florecer.
Es momento de pasar al curso siguiente.
Nos toca ahora vivir otras realidades. Realidades que equilibren tanto alejamiento, de nuestro objetivo esencial: “Que todos los seres alcancemos la más plena felicidad.”
La primera lección del nuevo curso, es sin duda la creación de la alternativa cuyo objetivo esencial, sea la felicidad de todos.
Cuando sólo conocemos ésta realidad que hemos creado, gestar un modelo nuevo, que dé lugar a una felicidad global plena, se muestra como un precioso reto, el reto de crear un mundo diferente, en el que todos entendamos que el sufrimiento de un ser, crea una guerra en el lado opuesto del mundo, ya que nada ni nadie está separado de todo cuanto existe.
La creación y el sentido de la Red Sostenible y Creativa, responde al deseo de apoyar el nacimiento, de esa nueva realidad, mediante todas las propuestas y alternativas que está desarrollando y que se están planteando.
El sueño que palpita en muchos corazones, es que podamos recuperar la humanidad, la libertad, las sonrisas, las visiones, la belleza, la armonía,…
Necesitamos todas las manos posibles, todos los corazones anhelantes, todo el empuje, entusiasmo, amor, apoyo, que podamos aportar, para crear esa nueva realidad.
UN HORIZONTE ARQUITECTÓNICO DIFERENTE
En este contexto, el reto apasionante que vivimos y que toca todos lo aspectos de nuestra realidad, nos lleva al equipo de Bioconstrucción de la Red, a investigar y expandir, nuevas formas, sistemas autoconstructivos, experiencias, o posibilidades que nos abran horizontes de esperanza ante el hecho de que cada ser humano, pueda construir, el espacio vital que le permita desarrollar con los suyos, el potencial sagrado que lleva en su interior.
Decía Nader Khalili, creador del sistema del Superadobe” o “Cal-Earth”:
“Todo hombre y toda mujer debe saber y poder construir su propia vivienda para él y su familia, utilizando la tierra bajo sus pies, e integrando si es posible, algunos elementos de la tecnología moderna… de forma que sus viviendas sean resistentes ante incendios, inundaciones, huracanes, terremotos y cualquier otro desastre natural.”
Esta capacidad, de saber y poder construir nuestra propia vivienda, mediante diferentes sistemas, conlleva la recuperación de potenciales creativos, que una y otra vez, hemos delegado, o nos han enseñado o forzado a delegar.
Nos comentaba hace unos días Quique, una de las personas involucradas en el proyecto Domoterra, que construye con Superadobe, que para adquirir una vivienda, tenemos dos posibilidades:
- Primera, hipotecarnos durante nuestra vida y quizás hipotecar junto con nosotros el futuro de nuestros hijos.
- Segunda, aprender el sistema adecuado y autoconstruirnos nuestra propia vivienda, dedicando a ello dos o tres años de nuestra vida.
Todos los animales en la naturaleza tienen el don de saber construir el espacio donde vivir y desarrollarse, bien de forma temporal o bien de manera permanente.
Los humanos también tenemos ese don, ahora bien, en el sistema social que hemos creado, y que ahora se desmorona, la continua delegación de responsabilidades en los especialistas, han ido dando lugar progresivamente a personas cada vez más incapaces de por sus propios medios, saber cubrir sus necesidades esenciales sin depender de nadie.
Las capacidades están dentro de nosotros, sin embargo en algún momento, elegimos la formación especializada, frente a la formación que lleve a la persona a la apertura de horizontes de amplia visión y capacidad de acción múltiple, que permite desarrollar los valores personales internos de autosuficiencia, en un camino de libertad e independencia. No se desecha la especialización, siempre que previamente se haya despertado esa capacidad de autosuficiencia e independencia.
Bárbara, del equipo de Domoterra, nos decía: Soy psicóloga, y me interesó aprender a construir con el superadobe. Cuando aprendí el sistema y se despertó en mí, la capacidad de poder construir mi propia casa, sentí internamente una sensación de inmensa libertad.
Nada tiene que ver una vivienda construida por uno mismo, con una vivienda comprada.
La impronta de la energía personal en cada rincón, hace que ese espacio sea verdaderamente nuestro.
La recuperación de esta capacidad, despierta un enorme nivel de satisfacción interna, y activa un montón de habilidades adormecidas, aprendiendo progresivamente, a dejar de ponernos en manos de otros.
El cumplimiento del sueño tantas veces anhelado, de que todo ser humano, tenga “su espacio” vital, donde crecer, ser, amar, soñar, realizarse, ser por sí mismo, es posible.
Extendiendo esta actitud de independencia y autosuficiencia a otros aspectos de nuestra vida, iremos creando progresivamente el nuevo paradigma en el que como humanos, al activar nuestro potencial, seremos cada vez más plenamente un holograma consciente de totalidad, de la riqueza personal, de nuestra riqueza colectiva y de la riqueza de Todo como Uno.
Habremos dado un salto cualitativo en la creación del nuevo mundo, que ineludiblemente tenemos que construir.
SUPERADOBE
En el grupo de Bioconstrucción de la Red, dentro de este intento de abrir caminos de libertad, independencia y autosuficiencia, nos hemos planteado profundizar en sistemas autoconstructivos, con los que uno de los bienes materiales más importantes de muchas personas y familias, la vivienda, pueda ser generado por uno mismo, con los recursos de su entorno.
Esta vez hemos tomado el Superadobe. En el futuro serán alternativas como: Bóvedas y cúpulas tabicadas, geodésicas, de cartón, vidrio… Casas de Paja, de Piedra, de Madera, de Adobe, de Tapial, de Barro, de Caña,de Bambú, de Cartón, de Textil. Casas enterradas o semienterradas. Haima. Yurta. Iglú. Cuevas… Regeneración de espacios existentes. Potenciación energética de nuestras viviendas…
Hace unos días en la sede de la Red, tuvimos una reunión en la que el equipo de Domoterra, nos expuso su experiencia en la construcción con superadobe.
Fue una reunión vibrante, donde el entusiasmo de abrir vías de libertad, subió el ánimo y el entusiasmo a cotas muy estimulantes.
El superadobe, consiste en un elemento constructivo que permite crear edificaciones, en la mayoría de los casos circulares, (Eco-Domo), aunque también es posible la creación de muros verticales, que combinados con cúpulas y bóvedas dan lugar a espacios orgánicos de gran riqueza ambiental y belleza.
Utiliza sacos a modo de tubos, llenos de tierra o arena. Las paredes se curvan hacia el interior para formar una cúpula resistente sin necesidad de usar madera. En lugares donde se corren peligros de terremotos o inundaciones, estas casas sobreviven, y si resultan dañadas, se pueden reconstruir inmediatamente.
Este concepto simple, funciona muy bien, y permite la realización de una manera sencilla, de espacios altamente bióticos, que envuelven a las personas en perfecta armonía con sus auras, y con las formas del cuerpo.
Quienes han experimentado el estar dentro de estas estructuras envolventes, nos hablan de la sensación de estar en el vientre de Madre Tierra, de calidez, regulación térmica excepcional, confort, ambiente singular muy agradable y bello.
“Es una tecnología fácil de estructuras bellas, con los materiales más sencillos. Conlleva poder construir nuestra propia casa con techos altos, arqueados, con poco más que agua y barro, acabándola después con revocos, alicatados, ventanas, elementos ornamentales,... en pocos días.
Bajo nuestros pies, hay todo un tesoro: la tierra y el agua. Por encima del suelo, las
personas que anhelamos paz, cooperación, felicidad.
Este sistema nos ofrece la libertad de ir a cualquier rincón del mundo, cavar y construir para nosotros, una vivienda, y para nuestra comunidad, los espacios comunes necesarios, utilizando la tierra, el sol, el viento y los elementos naturales. Durante el proceso, las personas descubren su propio potencial creativo”, decía Khalili.
Las viviendas de Superadobe están basadas conceptualmente en métodos de construcción tradicionales del medio oriente, que pueden incorporar, sistemas energéticos renovables, como agua caliente solar, equipos eléctricos fotovoltaicos, depuración y reciclaje de aguas, y otros que den lugar a edificios autónomos, ecológicos, sostenibles, bellos.
ASPECTOS ESENCIALES DEL SUPERADOBE
La construcción más peculiar y más adecuada del superadobe es el eco-domo, o
casa-cúpula-ecológica. Veamos algunos de los elementos esenciales de este Eco-Domo:
Construcción con espirales de sacos rellenos de tierracon cemento, o tierra estabilizada con cal.
Sin madera.
La bóveda central se puede complementar con cúpulas anexas para diferentes usos.
La unidad simple, una sola cúpula, tiene unas posibilidades muy diversas de uso.
Se puede repetir y juntar para formar viviendas más grandes y viviendas con patio.
Pueden construirlas equipos de 3-5 personas.
Pueden diseñarse teniendo en cuenta el sol, la sombra, y el viento para obtener enfriamiento y calefacción pasivos.
Las energías alternativas se pueden combinar, dependiendo de los códigos de construcción vigentes del lugar.
Parte del mobiliario interior se puede construir usando los mismos materiales.
Estamos creando entre todos un paradigma global nuevo.
Éste es un viaje precioso, y es un placer inmenso compartir cualquier dato o experiencia que nos facilite el avance.
Feliz viaje. Es el viaje de la Vida, que es el viaje hacia ti mismo, que eres Todo.
Angel Martínez
Equipo de Bioconstrucción de la Red Sostenible y Creativa