La belleza es un estado mental, y depende de cómo nos sintamos para apreciarnos más guapos, más atractivos. Parece que aquellos que están en un camino de conocimiento espiritual, de búsqueda interior, abandonan cualquier consideración hacía su apariencia, al pensar que es poco apropiado o coherente con el proceso de crecimiento que han emprendido. Nada más lejos de la realidad, somos un todo, espíritu y materia, y no hay una cosa sin la otra.
Repasando la historia y el concepto de belleza humana, vemos que es más una abstracción que una realidad, algo que generamos y ponemos fuera para...