El 5 de Julio celebramos el primer mercadillo consciente, buena compañía, momentos de celebración, alegría, fiesta. compartiendo saberes, talentos, conociendo personas llenas de energía que ya están
conectando con lo nuevo, dejando atrás las viejas formas. 

Fue un día de estar, compartir, conocer... en definitiva conectar con el corazón de la Red, con el sentir. En uno de los lugar más queridos por nosotr@s, el Ombú. Donde comenzó la Red, sintiendo primero, haciendo después y desde este proceso experiencial, asentando las bases.

Gracias a las chicas de Madre de Día Benicalap por su cariño en el hacer, claramente

basado en el sentir más profundo.

Gracias a Javier por ayudar a crear momentos de confianza, llenos de emotividad.

Gracias, Paco, por tu entusiasmo y compromiso con la salud.

Gracias, Mano, tu sensibilidad y sintonía llena cualquier espacio.

Concha, gracias por tu risa y alegría.

Rani, servicio y presencia.

Gracias a todo el equipo de Huerto City. Gran labor pedagógica, la soberanía alimentaria. Y sobre todo a María Teresa por su esfuerzo en mantener la energía...a veces no es fácil.

Gracias, Edurne, porque nos cuidas y mimas.

Pedro, por crear red cada día.

Gracias Ferran por confiar.

Javi, gracias por tu buen rollo. Fantástica tu iniciativa. La música siempre conecta con el corazón.

Gracias a Paz y Carla, de Saboreame. 

A Alejandro, energía pura.

Gracias, Juan Antonio por estar siempre dispuesto a ayudar.

A los chic@s de Zaragoza, que han hecho muchos kilómetros para estar con nosotros.

Mónica, Elena, Fernado, Pilar, Lunai, María dolores, Cecilia, Vicen, Esperanza, Irene (Agrolife), Luisa,

Tomas con su guitarra, Gabriel, Ana...cuentacuentos....y a todos los que nos habéis

acompañado en algún momento, confiando.

Gracias, niños, nos contagiáis vuestra alegría y nos hacéis conectar con la sabiduría olvidada.

Probablemente, alguien se ha quedado sin nombrar...gracias a ti también.

Somos muchos los que sentimos el despertar colectivo. El momento ha llegado, es aquí y ahora.

Donde el corazón se inclina, el pie camina

A. Jodorowsky